Inspección por Partículas Magnéticas
Descubre discontinuidades en materiales ferrosos antes de que sea demasiado tarde
Discontinuidades en la superficie y el subsuelo en los materiales ferrosos pueden llevar a paralizar la maquinaria y la producción, ya que a menudo no son fáciles de detectar a tiempo.
TÜV Rheinland ofrece inspecciones por partículas magnéticas (IPM) - uno de los procesos de ensayos no destructivos (END) para la detección de estas discontinuidades. Con equipos de última generación multidireccional IPM, podemos determinar una parte de mantenimiento o la conformidad, ahorrándole futuros costos y retrasos.
Nuestro personal está capacitado y certificado en múltiples normas y son capaces de analizar el mejor método de ensayos no destructivos para su producto.
Beneficios
Con nuestra inspección por partículas magnéticas, usted se beneficiará de:
- Guardar y agilizar la capacidad de producción antes del costoso mecanizado
- Prevenir fallos que ocurran a partir de piezas defectuosas - en ensambles sin inspección
- Obtener una ventaja frente a la competencia con un sello de auditoría neutral
- Reducir el riesgo de responsabilidad de la empresa con normas de seguridad documentadas
- Mostrar cuán altos son sus estándares de calidad
- Disfrutar de rápidos tiempos de auditoría y de nuestro servicio exclusivo
- Garantizar el cumplimiento de los requisitos gubernamentales locales y legales
Nuestros Servicios de Pruebas por Partículas Magnéticas
Los servicios de pruebas por partículas magnéticas de TÜV Rheinland detectan las discontinuidades en la superficie y el subsuelo en materiales ferrosos.
Productos cubiertos
Nuestros servicios abarcan materiales ferrosos.
Enfoque
Una máquina IPM horizontal húmeda es la máquina de inspección más utilizada para la producción en masa. La máquina dispone de la acción de un cabezal y una cola, donde se coloca la pieza para magnetización. Entre la acción de la cabeza y la cola, hay normalmente una bobina de inducción, que se utiliza para cambiar la orientación del campo magnético por 90° desde el cabezal. La mayoría de los equipos son personalizados y construidos para una aplicación específica.
Las piezas de energía se cubren con partículas de carga fluorescente que son vistas bajo una luz negra. Las partículas se acumulan en la zona de fuga y forman lo que se conoce como un indicio. El indicio es evaluado para determinar qué es, lo que pudo haber causado, y qué medidas deben adoptarse, si es el caso.
Después de que la pieza ha sido magnetizada, es desmagnetizada. Esto requiere un equipo especial que funcione en sentido contrario al que lo hace el equipo de magnetización. La magnetización se realiza normalmente con un pulso de alta tensión que muy pronto llega a un pico de corriente y se apaga al instante, dejando la pieza imantada. Para desmagnetizar una pieza, la corriente o campo magnético tiene que ser igual o mayor que la corriente o campo magnético utilizado para pieza imantada. La corriente o campo magnético es lentamente reducido a cero, dejando la pieza desmagnetizada.
Más Información
Inspección por partículas magnéticas (IPM) es un ensayo no destructivo (END), el proceso para la detección de discontinuidades superficiales y subsuelo en materiales ferrosos. Este proceso pone un campo magnético en la parte que puede ser magnetizada por la magnetización directa o indirecta. La magnetización directa se produce cuando la corriente eléctrica pasa a través del objeto de prueba y un campo magnético se forma en el material. La magnetización indirecta se produce no cuando hay una corriente eléctrica que pasa a través del objeto de prueba, sino cuando un campo magnético se aplica a partir de una fuente externa. Las líneas de fuerza magnética son perpendiculares a la dirección de la corriente eléctrica, que puede ser de corriente alterna (AC) o alguna forma de corriente directa (DC, AC o rectificados).
La presencia de una discontinuidad en la superficie o el subsuelo en el material permite que el flujo magnético fugue. Las partículas de hierro ferroso se aplican a la parte que se prueba. Las partículas pueden ser secas o en suspensión húmeda. Si se detecta un área de pérdida de flujo, las partículas son atraídas a esta área.
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